Si eres de los amantes del mar, Punta Umbría no te dejará indiferente, ya que este municipio onubense está bañado por el océano atlántico por un lado, y por la desembocadura de los ríos Tinto y Odiel por el otro. La zona bañada por el mar presenta una playa de varios kilómetros con grandes mareas. Un paseo hasta su espigón es una magnífica manera de empezar la visita. En la zona de la Ría de Huelva (donde desembocan los ríos antes nombrados), hay un paseo marítimo desde el que contemplar los barcos amarrados, o los que llegan de las faenas pesqueras. Porque, como no es de extrañar, Punta Umbría y la pesca van de la mano, por eso no te puedes marchar de allí sin degustar los platos de pescado y mariscos de la zona: coquinas, gamba blanca, boquerones, sardinas o el choco frito.
Si la naturaleza es lo tuyo, en la Avenida del Océano hay un carril bici que se adentra en el bosque de pinos que rodea el pueblo. Te animamos a que te adentres en el pinar, y cruces hasta la playa a través de los enebrales, donde verás la playa y sus dunas en su estado más salvaje.
Punta Umbría se encuentra a una hora y cuarto desde Sevilla en coche, la opción más recomendada. También puedes ir en transporte público. Desde la estación de Plaza de Armas salen autobuses hasta Huelva cada hora aproximadamente. Una vez en la estación de buses de Huelva, también con mucha frecuencia salen buses hasta Punta Umbría.
El lugar en la Tierra que más se parece a Marte está en Huelva, y se llama Riotinto. Pero, antes de llegar al planeta rojo, te vamos a contar por qué este pueblo es sin duda una de nuestras opciones favoritas para hacer un day trip.
Y es que Riotinto posee una de las minas a cielo abierto más grandes de Europa. Estas minas han sido explotadas por distintas civilizaciones de la antigüedad, y tras un parón de varios siglos, se reabrieron en el siglo XIX tras su venta a los ingleses, quienes se instalaron en la zona y trajeron, con ellos, su cultura. Tal es así, que deportes como el fútbol y el tenis entraron en la península por Riotinto, ya que eran deportes totalmente desconocidos en la España de la época.
El impacto visual de las minas no te dejará indiferente. Ni tampoco el río Tinto, cuyo color es similar al del vino, debido a los minerales que circulan por él. Y aquí llegamos al inicio de la historia: Marte. Y es que La Nasa, para emprender sus viajes espaciales a Marte y entender su posible ecosistema, hizo estudios de campo en Riotinto, puesto que los microorganismos que se desarrollan en el río y alrededores sobreviven en unas condiciones que pueden ser las mismas que las del planeta Rojo.
La visita a Riotinto puede, además, ser muy didáctica. En ella está el museo minero, en el que hacer un recorrido histórico. También hay un tren en el que hacer un recorrido por las minas y las zonas más interesantes. Riotinto, como puedes ver, tiene todos los ingredientes para no dejarte indiferente.
El transporte público tiene una oferta muy escasa, nuestra recomendación es alquilar un coche. En solo una hora estarás en tu destino.
Río Tinto
A solo media hora de Sevilla, se encuentra el municipio de Carmona, una localidad por la que pasaron romanos, musulmanes y cristianos, siendo parte viva de la historia de Andalucía. Así, en ella podemos encontrar monumentos de gran interés, que le dan al pueblo un encanto que hacen que pasear por él, sea una delicia.
Así, te recomendamos que te pierdas por sus calles y descubras rincones como la Plaza de San Fernando o el mercado de abastos, que data del siglo XIX. En este paseo, te toparás seguro con muchas casas palacio y edificios nobiliarios que dan fe de su esplendor pasado.
Y, cómo no, sus platos fuertes: El Alcázar del Rey Don Pedro (o Alcázar de Arriba), el Alcázar de la Puerta de Sevilla o de Abajo y la muralla o la Puerta de Córdoba.
Por si fuera poco, Carmona también tiene una gastronomía amplia, y no en vano tiene una muy buena fama elegir este municipio para “irse de tapas”, un broche de oro para una visita de diez.
La combinación en transporte público es muy buena, desde la Estación de San Bernardo hay autobuses muy económicos y con mucha frecuencia, recomendamos elegir esta opción para este day trip.
Carmona
En el norte de Huelva está su sierra, donde Aracena es su capital. Este municipio, a una hora y quince minutos de Sevilla en coche, es un pueblo blanco rodeado por montañas y bosques de encinas.
Nuestra recomendación es pasear por sus callejuelas y perderse, sin duda llegarás a sus rincones más especiales: la Plaza Alta en la que te encontrarás la Iglesia de la Asunción, la plaza de San Pedro con su ermita mudéjar, el conjunto de esculturas al aire libre que forman el Museo de Arte Contemporáneo de Andalucía o el Centro de Interpretación de Aracena.
Te animamos también a que conquistes su castillo, fortificación musulmana del s.VIII desde donde tendrás una maravillosa panorámica de la ciudad. Y, por último, que visites sus dos platos fuertes: el Museo del Jamón y la Gruta de las Maravillas.
Y es que en Aracena y alrededores existe una cría del cerdo ibérico única en el mundo, de la que se obtiene su producto estrella, el jamón serrano. No te puedes marchar sin probarlo. Como cierre, un lugar mágico, una cueva de más de un kilómetro de profundidad que cuenta con siete lagos, y con cientos de formaciones típicas como columnas, estalactitas y estalagmitas.
Desde la Estación de autobuses de Plaza de Armas, hay un bus que conecta con este pueblo, aunque la frecuencia es muy baja. Recomendamos ir en coche, ya que además te permite visitar otros pueblos de la zona.
Dehesa y Cerdo Ibérico
Los arrozales más grandes de Europa se encuentran en las marismas del Guadalquivir, dando lugar a un ecosistema realmente interesante, con paisajes de agua, aves y arrozal que cambian según el estado de la cosecha. Si eres amante de las aves, este day trip te va a encantar.
La Dehesa de Abajo es una reserva natural en este entorno de arrozales. En su paisaje destacan lagunas como La Rianzuela, que está rodeada de matorral, pinos y acebuche. Cuenta con una zona de observación de aves, desde la que observar según la época del año a especies como flamencos, patos colorados o patos azulones. También hay senderos bien delimitados por los que dar un paseo más que agradable.
En la zona hay un restaurante y también un aréa de merenderos, aunque nuestra recomendación es probar la gastronomía local. Como no podía ser de otra manera, el arroz cocinado con distintos ingredientes, es el plato estrella. Destaca el arroz con pato o cangrejo de río.
Al ser una zona de naturaleza pura, sólo se puede llegar en coche.
Ronda es otra excursión imprescindible si todavía no se conoce.
Con su Puente Nuevo, al que todos allí conocen como El Tajo: una espectacular construcción que da vértigo por su altura, pero también por su belleza, o su Plaza de Toros, una de las más antiguas de España que encandiló a personajes ilustres como Orson Welles o Ernest Hemingway.
En este enlace te proponemos todo lo que se puede hacer, ver y degustar en un día en Ronda.
Se puede llegar en autobús que sale desde la Plaza de Armas (unas 2 horas de duración) o en coche (1,5 horas aproximadamente)
Tajo de Ronda
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